21.09 PAZ

Hoy, 21 de septiembre, es el Día mundial de la Paz. Un día en el que se invita a los pueblos a la reflexión, y lo más importante, a abandonar las armas.

Siempre he creído que no tenía mucho sentido dedicar un día a un tema en concreto, por ejemplo el día de la mujer trabajadora, el día del niño,... porque me parecía que era "pan para hoy, y hambre para mañana". Pero hoy me doy cuenta de que somos tan cobardes, tan egoístas y tan insolidarios que es necesario que la televisión (o en este caso internet) nos recuerde que hoy es un día especial, y tomemos conciencia de los problemas que existen en el mundo.

Porque nos creemos intocables, pensamos que el hecho de vivir en el primer mundo nos sirve de burbuja protectora que nada ni nadie puede romper. Las noticias sobre las guerras, el hambre, los desastres medioambientales, ... han pasado a formar parte de lo cotidiano. Pero igualmente las sentimos lejanas, ajenas. Por un segundo pensamos "vaya, pobrecitos", giramos la cabeza al otro lado y seguimos viviendo nuestra propia farsa en nuestro mundo lleno de lujos y comodidades.

Por esto creo que es necesario que por lo menos un día al año tomemos conciencia de los problemas que asolan nuestro mundo, y que, en la medida de nuestras posibilidades, luchemos por acabar con ellos.

Ni tú ni yo somos líderes espirituales, ni tampoco tenemos un gran liderazgo entre las masas, pero no es necesario ser un gran dirigente mundial o una personalidad del pensamiento para aportar nuestro grano de arena.

Porque la paz se puede conseguir de múltiples formas, pero la vía es la misma: "No hay caminos para la paz, la paz es el camino" decía Gandhi. Tenemos la obligación de luchar por la paz, de exigir a nuestros reprensentantes políticos que cese la violencia: ETA, Líbano, Irak, Colombia, China,...

Pero la paz no debe ser vista únicamente como un mecanismo político. Todos tenemos a nuestro alcance la posibilidad de acabar con la violencia, de proclamar la paz. Porque una simple mirada, un gesto, una palabra pueden ser el mejor antídoto contra la violencia. Sí, esa violencia que vivimos día a día, y a la cual nos hemos acostumbrado, en la cola del autobus, en el supermercado, en los colegios,.. Es ahí donde hay que erradicar la violencia, y luchar por la paz.

Y para terminar, os pido que hagáis extensiva esta reflexión a todos los días del año, aunque sí al menos he conseguido remover vuestras conciencias por un instante, me doy por satisfecho. Pero por favor, no acabéis de leer esto y miréis para otro lado.